Un equipo del Centro para el Manejo del Dolor en el Hospital Universitario de St. Anne en Brno, República Checa, introdujo recientemente un método único para la administración de Cannabis vaporizada.
Esta iniciativa, dirigida por el Dr. Radovan Hrib y desarrollada en colaboración con el Director de Investigación y Desarrollo (ICCI) de Ethan Russo, entrega a los pacientes acceso a cannabis medicinal mediante vaporizadores.
¿Por qué Cannabis Vaporizada?
El Centro para el Manejo del Dolor en Brno ha recetado cannabis medicinal para el tratamiento del dolor desde 2016. Pero hasta el lanzamiento del programa de vaporizador en abril de 2018, estaba empleando principalmente cápsulas para su administración oral. El cannabis medicinal tomado por vía oral plantea algunos desafíos. Los primeros efectos aparecen en 30 a 60 minutos, alcanzan su máximo en dos a tres horas y bajan en aproximadamente cuatro a ocho horas.
La inhalación de cannabis medicinal vaporizado permite que muchas de las sustancias terapéuticas del cannabis entren en los pulmones. Ahí se absorben rápidamente y viajan por todo el cuerpo. Los primeros efectos del cannabis vaporizado ocurren en unos pocos minutos y desaparecen gradualmente en tres o cuatro horas. Este rápido inicio de efectos hace que la evaluación del tratamiento sea más manejable.
El uso de cannabis vaporizada en el manejo del dolor ha dejado en evidencia la importancia de centrarse en métodos de suministro que maximicen el efecto sinérgico de todas las sustancias bioactivas complejas en la planta de cannabis, o el llamado efecto séquito. Shimon Ben-Shabat Ph.D. y Raphael Machoulam Ph.D. descubrieron el efecto séquito en su estudio seminal de 1998 (Ben-Shabat S et al .: efecto de séquito: los ésteres de glicerol de ácido graso endógenos inactivos aumentan la actividad del cannabinoide 2-araquidonoil-glicerol. Eur J Pharmacol, 1998, 17, 353 (1) , 23-31).
El uso de cannabis medicinal del Centro para el Manejo del Dolor y el interés en utilizar nuevas herramientas para optimizar el método de administración a los pacientes. Es un excelente ejemplo de medicina centrada en el paciente y el uso de la innovación para mejorar los resultados del paciente.
La prescripción de cannabis medicinal en la República Checa está regulada por el Decreto No. 236/2015, que impone restricciones tanto a quién se le permite prescribir como a qué condiciones son elegibles para la prescripción de cannabis medicinal.
